GRACIAS DIOS
Es inscribible lo que nos ama Dios y su gran misericordia, quiero aprovechar este espacio para dar mi testimonio del amor de Dios en mi vida, así como participarles el motivo por el cual estuve sin poder escribirles.
Resulta que sufriendo de unas molestias físicas acudí al Seguro Social para hacerme un chequeo donde luego de varios exámenes se determino que tenia un problema en el colon ( cáncer ) y que debía ser intervenido quirúrgicamente por lo cual no tuve mas opción que internarme en el Hospital,
Alberto Sabogal Sologuren del Callao - Perú. donde gracias a Dios y a la calidad de los Médicos, Enfermeras y técnicos, pude recuperar mi salud y ahora me encuentro en mi hogar en reposo por un tiempo para luego de que cierren mis heridas reincorporarme a mis actividades habituales.
Sin embargo debo decirles que mi mayor problema no era el relacionado a mi salud, sino el que debía batallar contra nuestro enemigo satanás, y es que en esos momentos venían ideas a mi mente en la que me decían: ¿Porque si Dios te ama como dices, te encuentras tirado solo en un hospital? ¿ Donde están esos amigos y hermanos que te aprecian y quieren? Dudas y preguntas con las cuales trataba cada día de hacerme olvidar que no estaba solo tirado en un hospital sino que Dios estaba a mi lado, y actuaba por medio del personal del hospital para que su voluntad se cumpla en mi vida, y aun que no recibía muchas visitas había un grupo grande de hermanos y amigo que oraban y pedían por mi salud.
En realidad, aun cuando yo no tenia acceso a Internet, le había pedido a mi cuñado que usara mi cuenta de facebook para publicar unos mensajes para mis amigos y hermanos, por cuanto estaba seguro que era la única forma de poderlos enterar de mi estado y es así como sus mensajes y saludos que no se hicieron esperar me ayudaron a vencer al tentador y reafirmar mi fe en el y la confianza de que Dios es grande y lleno de misericordia. 
Y el sabe por que permite que pasen algunas cosas en la vida de sus hijos, y es que aun cuando pase un gran tiempo de joven cuidando a mi madre cuando sufrió un cáncer de colon que día a día iba acabando con su vida jamas llegue a entender cabalmente el dolor y soledad que se siente, y el drama de muchos que se encuentran hospitalizados o tienen un pariente en una situación tan triste y desesperante, debo decir que esta es una experiencia que me a ayudado a comprende los consejos que la hermana Elena G. de White, ha dejado en sus escritos y aun cuando ya los había leído no me había dado cuenta de los valiosos que son especialmente en estos días en que estamos viviendo.
Y es que cada día que pasa encontramos personas de todas las edades con enfermedades graves que están necesitando de consuelo y ayuda, personas que al igual que las personas que Jesús curo no solo necesitan sanidad física sino que también requieren de sanidad espiritual, la cual como hijos de Dios y colaboradores de Cristo tenemos que procurar de acuerdo a nuestras posibilidades, es pues, necesario que atendamos a sus necesidades físicas sin dejar de presentar a Cristo domo el gran medico que puede atender todas nuestras necesidades.
Es por todo esto que quiero darle gracias a Dios y a los Médicos enfermeras y técnicos del Hospital: Alberto Sabogal Sologuren del Callao - Perú, y muy en especial de los doctores:
Dra. Claudia Mori Torres del servicio de Gastroenterología que detecto mi mal.
Dr. Manuel Cornejo Luna, y José Saman Becerra, Quienes me operaron
Dr. Héctor Medrano Samame, Jefe de cirugía.
Dios los bendiga y siga utilizándolos como sus instrumentos mediante los cuales lleven salud a todos los enfermos que atiendan.
Que Dios nos bendiga, nos guarde e ilumine.
Juan Manuel
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