NUESTRA FELICIDAD

NUESTRA  FELICIDAD

Mis amig@s, es un verdadero honor y una alegría poder escribir para compartir la felicidad que siento por la vida y la salud que día a día el Señor nos concede, aunque no tengamos una salud perfecta y probablemente podamos estar padeciendo algún mal, debemos estar agradecidos con Dios por habernos dado todo, lo mucho o lo poco que tenemos.

Amig@s, muchos tratan de conseguir cosas que creen que les va dar felicidad, y no se dan cuenta que la verdadera felicidad se encuentra en cosas que no se pueden comprar, un buen amig@, un padre, una madre, un buen hermano, un buen hijo, etc.

Esto es algo que jamas podremos comprar, aunque algunos piensen que si, esto es algo que solo podemos tener si actuamos de una forma correcta y honesta en la vida. 
Pero sin embargo tenemos un enemigo que se ha encargado de tergiversar la verdad haciendo que la mentira parezca verdad y nos pone una serie de engaños con el fin de que vivamos sin tener plena conciencia de que lo que estamos haciendo esta mal y nos va a traer grabes consecuencias que no podremos evitar, porque todo lo que el hombre hiciere de ello dará cuenta un día delante de Dios.

Muchos buscan la felicidad en cursos de superación personal, en filosofías orientales, en las cosas materiales cuando la verdadera felicidad se encuentra en la palabra de Dios que dice que todo lo que hagas en esta vida tienes que hacerlo para el Señor y no para los hombres, porque la verdadera recompensa la que vale la pena por sus actos, solo te la puede dar Dios.

Cualquier recompensa que puedas conseguir que no sea de Dios jamas sera tan gratificante y duradera como la que nos puede dar Dios.

También es importante estar felices con lo que tenemos, porque si no aprendemos a disfrutar lo poco o lo mucho que tenemos y somos jamas disfrutaremos de nada porque siempre estaremos deseando mucho mas de lo merecemos por nuestro egoísmo.

El egoísmo es el peor sentimiento que nuestro corazón puede albergar, y el causante de nuestra infelicidad.

Amig@s, amemos de todo corazón a nuestro prójimo y realicemos todas las cosas sabiendo que las hacemos por amor a Dios, y no pensemos en lo que vamos a ganar o perder, porque lo que no ganemos en la tierra lo ganaremos en el cielo.

Que Dios nos bendiga, nos guarde e ilumine.

Juan Manuel

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