SER FELICES

SER   FELICES

La oportunidad de ser felices no se presenta sola sino que se encuentra en hacer las cosas con amor y honestamente.

Podemos pensar que con nuestras propias fuerzas podemos alcanzar la felicidad pero eso no es cierto ya que somos pecadores y necesitamos ser salvados y renovados para poder vivir en paz y armonía con lo que nos rodea, y esa salvación y renovación  solo puede dárnosla Jesús quien murió en la cruz para pagar por nuestros pecados, ( si mi amigo los tuyos y los míos ) y darnos la salvación. 

El Señor Jesucristo murió en nuestro lugar para que nosotros no tengamos que sufrir la muerte eterna pero este sacrificio para que nos beneficie tiene que ser aceptado por nosotros recibiendo a Cristo como nuestro Señor y Salvador no vasta con creer simplemente en Cristo y seguir viviendo como creemos que debemos vivir tenemos que estudiar su palabra para conocer cual es el camino correcto en que debemos andar.

Cuando Cristo estuvo entre nosotros nos dejo claramente especificado como debíamos vivir para agradar a Dios y ser su pueblo escogido, un pueblo al cual un día Cristo vendrá a llevar con el a vivir por la eternidad, pero para ello debemos aprender a vivir de acuerdo a su palabra, porque si aquí no podemos vivir felices viviendo de acuerdo a su palabra ¿ como viviremos en el cielo con el donde solo se vive de acuerdo a la voluntad de Dios ? no nos engañemos si en esta vida no somos felices viviendo con Cristo como nuestro señor y siguiendo sus enseñanzas tampoco podríamos serlo si fuéramos con el por la eternidad.

Entonces si queremos ser felices en esta vida y vivir por la eternidad en un mundo mejor donde no halla pecado ni dolor debemos recibir a cristo en nuestro corazón y aprender a vivir de acuerdo a su voluntad que se encuentra en la Sagrada Biblia, dejando de lado nuestros deseos carnales y dándole su lugar a los deseos que Dios ponga en nuestro corazón por medio de su Espíritu Santo.

Recibe hoy a Cristo y dale tu corazón para que la paz y la felicidad que el nos brinda llene tu vida y tu corazón.

Que Dios nos bendiga, nos guarde e ilumine.

Juan Manuel.

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